
La Unión Tranviaria Automotor (UTA) decidió convocar a un paro de colectivos por 24 horas para el martes 6 de mayo en todo el transporte automotor de corta y media distancia, ante el fracaso en las negociaciones paritarias y el vencimiento de la conciliación obligatoria.
El origen de la crisis tiene lugar en la ya crónica falta de fondos que tiene el sistema de colectivos, producto de las tarifas y los subsidios que define el Gobierno nacional.
Las cámaras que agrupan a los empresarios ofrecieron un bono extraordinario, de carácter no regular ni habitual, de $ 40.000 a pagarse el 26 de mayo; $ 50.000 el 16 de junio; y otros $ 70.000 el 15 de julio, con un nuevo salario básico de $ 1.270.000 para cada chofer.
Las empresas aseguran que tienen un déficit de 40% en sus costos contra lo que reciben de los pasajeros y del Estado.
La propuesta de las cámaras empresariales, que no llega al 1% mensual de incremento -contra una inflación que ronda el 3% a 4%- fue calificada como un "avasallamiento a la dignidad" por parte de la UTA.
"Los empresarios han ofrecido por los meses de febrero, marzo, abril, mayo y junio un incremento remunerativo de menos del 6% a pagarse a partir del mes de junio. Es una falta de respeto", lamentaron los sindicalistas.
"Pese a las gestiones realizadas por este Consejo Directivo Nacional, hasta el momento no se ha podido mejorar el ofrecimiento empresario y se ha agotado el periodo de Conciliación Laboral Obligatoria. Conforme ello, como primera medida, se ha resuelto un paro de actividades por 24 horas para el día martes 06 de mayo del corriente, a partir de las 00.00 horas a nivel nacional, en empresas de transporte de pasajeros de corta y media distancia", expresaron.
Y concluyó la UTA: "Una vez más los trabajadores todos juntos, sin distinciones, saldremos a defender nuestros salarios. ¡Los convocamos a todos y todas!".
De acuerdo a los datos del Índice Bondi, que elabora la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA, integrada por el grupo Metropol), el precio real del boleto sin subsidios era de $ 1.596,40 en marzo, pero los usuarios pagaron un mínimo de $ 371,13 -y un promedio menor, por efecto de las bonificaciones cuando se acumulan varios viajes-, mientras que las empresas recibían un total de $ 973,76.
Hasta mediados de abril, según el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la UBA y el Conicet, el gasto público en subsidios a los usuarios que viajan en colectivos por parte del Estado nacional acumuló unos $ 221.602 millones, con una caída interanual del 54% en términos reales.
Fuente: Clarín